Dentro de las tareas a desarrollar por el alumno, estudiar es aquella actividad que muchas veces no es de mucho agrado para los discentes porque requiere esfuerzo, dedicación y a veces se hace con la premura de la cercanía del período de evaluaciones.
El estudio, no obstante, es un pilar primordial, pues nos permite afianzar aquellos conocimientos que hemos recibido en el aula de clases durante el período sobre el cual nos someteremos a un examen y para la vida. Para poder avanzar en nuestro caminar académico es necesario que nos enfrentemos a este reto de aprendizaje para dar muestras de que hemos comprendido el contenido abordado y poder recibir los nuevos temas conforme al programa de la modalidad que se curse.
Es decir, el estudio se debe convertir en nuestro aliado desde las etapas primarias de nuestra vida, con el fin de lograr destacar en un mundo cuyo conocimiento se renueva con plazos más avanzados que como lo hacía antes, esto debido a la tecnología y sus diversos medios de difusión, lo que convierte muchas veces la base de lo aprendido en algo obsoleto, no aplicable en todos los aspectos de la realidad actual.
Por la importancia del estudio, hoy nos centraremos en identificar algunos errores comunes que se cometen en la infancia, adolescencia y adultez que evitan que se le saque el mayor provecho a la herramienta que tenemos para crecer y crecer como personas y, en efecto, como sociedad: el saber estudiar.
A continuación te enumeramos algunos que hemos identificado, pero tú también puedes comentarnos los tuyos:
1. No buscar un lugar adecuado para hacerlo: al momento de estudiar es pertinente definir un lugar para ayudar a la concentración. Prefiere un espacio donde estés alejado de ruidos que te impidan volver productivo el tiempo de repaso de contenidos. Dentro de tu hogar identifica un lugar y hazlo conocer a tu familia para que cuando te vean allí procuren guardar silencio y respetar tu labor.
2. No limpiar antes la zona donde estudias: el aseo, el orden, te da tranquilidad mental, no te cargas por ver el lugar donde estudias lleno de sucio o con cosas amontonadas. La limpieza de tu zona de estudio permitirá a tu mente centrarse en estudiar, en analizar desde una mesa limpia y una silla cómoda lo que es pertinente conocer para salir con éxito de tus exámenes de parcial o fin de año.
3. Tener distractores cerca: si en el lugar donde te hallas estudiando hay un televisor o tu celular cerca, lo sentimos, te vas a distraer. Puede ser que tu serie favorita esté en el televisor o el timbre o vibración del teléfono te desenfoquen un poco. Mejor apágalos un momento, para todo hay tiempo, y en este caso estudiar tiene el primer lugar, es prioridad.
4. No destinar un tiempo específico para dicha actividad: hay quienes afirman que el tiempo no les ajusta, pero realmente lo que ocurre es la no planificación del mismo. Estudiar requiere su tiempo, por ello te invitamos a establecer la cantidad de minutos u horas que destinarás, las cuales pueden empezar días antes de la semana de exámenes, no necesariamente un día antes de la evaluación. ¡El tiempo realmente es oro, vida, aprovéchalo!
5. Desvelarse estudiando: dentro de los errores más repetidos está el pensar que desvelarse una noche antes leyendo nuestros apuntes de las clases nos va a ayudar a retener lo que se abordó. Sin embargo, lo que provoca es andar con sueño al día siguiente, con cansancio, estrés por la evaluación o nervios excesivos y culpa por saber que se pudo haber hecho más para destacar en las evaluaciones, sin mencionar el abuso de bebidas con cafeína o muy dulces para mantenerse despierto.
Esperamos que esta información sea de utilidad para ti y que puedas corregir estos u otros errores que estés cometiendo al estudiar para que puedas sacar siempre el mayor provecho de esta actividad.